La familia Marimón inaguró la tienda en un local de 45m2, al principio muy enfocada al mundo del trialsin y la bmx ja que Jordi Marimón, competía en estas disciplinas. Desde los inicios se puso la atención en el servicio de posventa, tanto fue así que a raíz de todo esto se crearon escuelas de conducción, demostraciones, además de asistencia técnica a todas las competiciones de los deportes mencionados, tanto a nivel nacional como internacional en los campeonatos del mundo.